Oda a la Ola
Tiempos de retorno, de reinauguración, de reflexión. Y para tal fin, estreno estos perezosos trazos que traje conmigo de la costa.
Oh, adorado mantel de sal
sólo tu refrescas corazones
y ese zumbido celestial
posees en mil tenores.
El viento os acaricia
y la arena os contiene
y el sol os envidia
pues de calor se muere.
Naces como un gesto
en una cara angelical
y yo sutilmente me presto
a contemplarte a vos y al mar.
El horizonte opacas
mientras os elevas
y las nubes giran
y revoltosas miran.
Majestuosa os impones
y ruges cual morbosa fiera
aunque poco es lo que vives
en momento alguno desesperas.
Luego os lanzas furiosa
sobre las aguas inertes
y os conviertes en espuma
mientras moribunda os meces.
Y llegas a la orilla
y a la arena cuentas
vuestra póstuma aventura
y vuestra eterna siesta.
Aquí te esperaré, querida ola
a que vuelvas a teñir de vida
esta playa, esta isla desierta
esta inmutable melancolía.
Oh, adorado mantel de sal
sólo tu refrescas corazones
y ese zumbido celestial
posees en mil tenores.
El viento os acaricia
y la arena os contiene
y el sol os envidia
pues de calor se muere.
Naces como un gesto
en una cara angelical
y yo sutilmente me presto
a contemplarte a vos y al mar.
El horizonte opacas
mientras os elevas
y las nubes giran
y revoltosas miran.
Majestuosa os impones
y ruges cual morbosa fiera
aunque poco es lo que vives
en momento alguno desesperas.
Luego os lanzas furiosa
sobre las aguas inertes
y os conviertes en espuma
mientras moribunda os meces.
Y llegas a la orilla
y a la arena cuentas
vuestra póstuma aventura
y vuestra eterna siesta.
Aquí te esperaré, querida ola
a que vuelvas a teñir de vida
esta playa, esta isla desierta
esta inmutable melancolía.
1 Comments:
Nice poettry. Lamentablemente las playas de por estos lugares se ven marrones en vez de como en tu foto xD.
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